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Higiene del sueño

La tendencia en los países industrializados sugiere que las personas sufren cada vez más falta de sueño. En el mundo ajetreado de hoy, dormir es tan importante como la dieta y el ejercicio. Para tener energía durante el día, necesitas recargar energías por la noche.

¿Por qué es importante dormir?
El sueño es un período de desarrollo, sanación y rejuvenecimiento esencial para el funcionamiento normal y saludable del cuerpo humano. Afecta nuestra salud física y mental, así como la capacidad de nuestro sistema inmunitario para combatir y soportar enfermedades. La mala calidad del sueño también se relaciona con muchas afecciones, como la obesidad, la diabetes y la hipertensión arterial.
Dormir mejora la lucidez mental, la energía, el estado de ánimo, la memoria, el tiempo de reacción, la productividad, el rendimiento, las habilidades de comunicación, la seguridad y la longevidad. La mayoría de los adultos necesitan ocho horas de sueño reparador ininterrumpido cada noche. Los niños, incluso los adolescentes, deberían dormir nueve horas o más.

¿Por qué no puedo dormir?
Hay muchos factores que afectan la calidad del sueño, independientemente de tus esfuerzos por acostarte a tiempo y quedarte dormido. Afecciones como el asma o las alergias, el dolor crónico, el estrés, la ansiedad o la depresión pueden impedir un buen descanso.
Medicamentos para la presión arterial y otros como antidepresivos, antihistamínicos, descongestionantes y relajantes musculares pueden afectar el sueño. Consulte con su profesional de la salud antes de suspender o iniciar cualquier medicamento para mejorar su sueño.

Tu estilo de vida
La nicotina, la cafeína y el alcohol pueden dificultar el sueño. Los cambios en la vida, como un bebé o una mudanza, son disruptivos, pero a menudo temporales. Si trabajas a turnos o viajas con frecuencia, tu cuerpo podría tener dificultades para adaptarse. Una hora de dormir regular puede ayudarte a ajustar tu reloj biológico y a mantenerte en forma.

Evitar ciertos hábitos de estilo de vida y adaptarse a otros de manera equilibrada le ayudará a regular su horario de sueño.
Tu entorno de sueño

Para algunas personas, lo importante es dónde duermen. Soluciones rápidas incluyen comprar una cama nueva, instalar cortinas opacas o asegurar que la habitación esté tranquila, fresca y silenciosa. Incluso escuchar música relajante o ruidos de fondo, como el del mar o el ruido blanco, puede ayudarte a relajarte y conciliar el sueño.

Trastornos del sueño
Existen más de 70 trastornos del sueño. Algunos de los más comunes incluyen el insomnio, la narcolepsia, la parasomnia y el síndrome de apnea obstructiva del sueño .

Buenos hábitos de sueño

  • Mantenga un horario de sueño regular. Acuéstese y levántese aproximadamente a la misma hora todos los días. La hora de despertarse es especialmente importante: manténgala igual, incluso los fines de semana.
  • Duerme sólo lo necesario para sentirte renovado durante el día;
  • Acuéstese solo cuando tenga sueño. No intente conciliar el sueño; esto solo empeorará las cosas. Si no puede dormir en 20 minutos, levántese, salga de la habitación y haga otra cosa (por ejemplo, escuche música tranquila, tome una infusión), pero evite actividades estimulantes (por ejemplo, fumar, ver la televisión, trabajar). Vuelva a la cama cuando tenga sueño. Repita el procedimiento según sea necesario.
  • Evite tomar siestas durante el día ya que pueden interrumpir mucho su sueño nocturno.

Consejos importantes sobre estilo de vida

  • Haga ejercicio regularmente, idealmente por la mañana o por la tarde, o al menos cuatro a seis horas antes de acostarse;
  • No coma ni beba nada que contenga cafeína (es decir, chocolate, té, café y cola) dentro de las seis horas previas a acostarse;
  • No fume ni beba alcohol entre tres y cuatro horas antes de acostarse; y,
  • Intente reservar un momento para resolver problemas o preocuparse temprano en la noche (es decir, haga listas de problemas y de si hay algo que pueda hacer para resolverlos).
  • Evite preocuparse en la cama.

Hábitos en el dormitorio

  • Limite el dormitorio al sueño y la actividad sexual (el dormitorio no debe ser un área de actividad; es decir, no vea televisión, coma, lea en la cama ni mire el teléfono o la computadora). Enseñe a su cuerpo a asociar el dormitorio con el sueño.
  • Mantenga su habitación cómoda, segura, tranquila, oscura y fresca (demasiado caliente o demasiado frío perturbará el sueño);
  • Duerma solo si su compañero de cama perturba su sueño o si le preocupa perturbar a su pareja; y,
  • Mantenga a las mascotas fuera del dormitorio si perturban su sueño.

Rituales antes de dormir

  • Evite actividades que estimulen el cerebro, como jugar videojuegos o ver la televisión. Programe actividades relajantes antes de acostarse.
  • Tome un refrigerio ligero antes de acostarse si tiene hambre; y,
  • Tome un baño tibio durante al menos 30 minutos, dos a cuatro horas antes de acostarse.

Si continúa sintiéndose privado de sueño o tiene inquietudes sobre la calidad de su sueño, hable con su médico o enfermero especializado; es posible que necesite una derivación a un especialista del sueño.